¡Cuidado, los niños de hoy son...!

Autor: Padre Alejandro Cortés González-Báez  

 

 

Con frecuencia oímos frases como: “Los niños de hoy son los hombres del mañana”. Considero que esta forma de pensar es peligrosa. La infancia no sólo es una época de transición por la que se pasa, esperando que llegue el día en que seremos mayores, sino que tiene un valor propio muy importante.

Los niños de hoy son los niños de hoy, y no debemos despreciar la etapa de la niñez restándole importancia porque todavía no puedan trabajar, o no tengan cédula profesional, o no se puedan casar. Hay muchos casados que lo mejor que podían haber hecho era permanecer solteros.

Con muchos juegos y diversiones, supuestamente infantiles, lo único que estamos haciendo es suprimir la infancia de los pequeños. Un niño que no juega y se convierte en espectador de televisión y de video-juegos, probablemente gaste su vida sin vivirla, observando cómo los demás viven las suyas en telenovelas, series policíacas, noticieros, partidos deportivos…

Ibsen, describiendo a uno de sus personajes, dice: “La vida para él no constituía más que una sucesión de meses y años que el viento se llevó... El único epitafio que se podría grabar en la losa de su tumba sería éste: Aquí no yace nadie”.

Por mi labor sacerdotal, en los últimos años he podido percatarme del crecimiento de tensiones y depresiones que experimenta tanta gente, incluso adolescentes y también niños, y temo que este fenómeno siga creciendo dado que los pequeños no gozan de la tranquilidad y seguridad que proporciona insustituiblemente un ambiente familiar sano, lleno de respeto y de amor; sino que por el contrario viven en un ambiente de violencia dentro y fuera de las pantallas de televisión. Todo esto rompe, o por lo menos agrieta, la estructura emocional de tal forma que no pueden pisar con confianza en un suelo que carece de estabilidad y, además, están siendo influenciados por un muy dañino relativismo.

Por otra parte, en la infancia de los niños Dios desaparece muy temprano para dejar paso a los superhéroes, quienes gracias a poderes mágicos y el uso de la violencia, vencen a unos malos que son tan fuertes y tan violentos como ellos.

Hace años, tres jóvenes en Estados Unidos mancillaron y mataron en un parque a una joven quien hacía poco tiempo había terminado su doctorado en una Universidad de Nueva York. Cuando los atrapó la policía, declararon que su idea inicial no era llegar a esos extremos, simplemente buscaron divertirse, pues estaban aburridos. Está claro que hoy la violencia se ha convertido para muchos en un pasatiempo, entre otros motivos, porque a nuestros niños los hacemos “adultitos” cada vez más temprano.

Reflexionemos en que existen muchos juegos infantiles que son sumamente educativos y actuemos en consecuencia.